Scottish teen James Maris sentenced to community supervision for attempting to 3D-print a gun. El adolescente escocés James Maris fue sentenciado a supervisión comunitaria por intentar imprimir una pistola en 3D.
James Maris, a 19-year-old from Scotland, was sentenced to a three-year community supervision and 300 hours of unpaid work for attempting to build a 3D-printed FGC-9 gun. James Maris, de 19 años de Escocia, fue sentenciado a tres años de supervisión comunitaria y 300 horas de trabajo no remunerado por intentar construir una pistola FGC-9 impresa en 3D. Maris, who received the 3D printer as a gift, pleaded guilty to Firearms Act offenses. Maris, quien recibió la impresora 3D como regalo, se declaró culpable de delitos relacionados con la Ley de Armas de Fuego. The judge considered his mental health diagnoses and early guilty plea, avoiding a prison sentence. El juez consideró sus diagnósticos de salud mental y su temprana declaración de culpabilidad, evitando una sentencia de prisión. Maris is under strict surveillance, including electronic tagging and password sharing with authorities. Maris está bajo estricta vigilancia, incluyendo el etiquetado electrónico y el intercambio de contraseñas con las autoridades.